En las actuales circunstancias de economía globalizada, es indispensable para la subsistencia de las sociedades organizadas detectar áreas de competencia que les permitan desarrollar fortalezas productivas con alto valor diferencial.
A la generación de recursos derivados del comercio de bienes y servicios usuales, se han incorporado progresivamente otros, asociados a tradiciones culturales religiosas o mitológicas, y creaciones artísticas recientes de excepcional difusión y valor económico, que se constituyen en Industrias Culturales.
Las actividades productivas tradicionales tienen posibilidades de crecimiento restringido por limitaciones en el desarrollo tecnológico y altos costos; las nuevas tendencias internacionales proponen desarrollar la cultura como industria por el significativo valor económico que puede generar, ya que posibilita incorporar a diversos sectores de la sociedad convirtiéndolos en nuevos actores productivos.
Según la UNESCO “Las industrias culturales son fuente de empleo, lucro e ingresos, al mismo tiempo que un vector esencial del fomento de la diversidad cultural en el plano local e internacional”.
El desarrollo de Industrias Culturales (IC) exitosas, que promuevan un relevante posicionamiento en el plano internacional, requiere del compromiso conjunto de estado y comunidad, impulsando políticas institucionales concretas que aporten estrategias, marco jurídico y recursos sostenidos en el largo plazo.
Nuestro país, con reconocidos aportes a la cultura en sus múltiples áreas, cuenta con un recurso original, propio, creado en estas tierras: el Tango.
Compendio de nuestra Identidad Nacional, única por los factores que lo fueron conformando, el Tango Argentino ha transcurrido su centenaria historia con épocas gloriosas y ocasos temporales. Desde hace tres décadas, el Tango recobra fuerza creciente, inicialmente en Europa y Japón, expandiéndose al resto del mundo hasta sus más remotos confines.
Capitalizar este fenómeno para promocionar al país en el exterior implica delinear e implementar “estrategias específicas” destinadas a un público global.
Un estudio realizado por Booz Allen & Hamilton para la compañía Tango City, concluyó que la marca Tango tiene un peso específico comparable a Coca Cola.
El Tango Argentino equivalente en el mundo a nuestra Marca País, es generador de un reconocido valor emocional que promueve desarrollo cultural y económico.
La propagación global de la pasión por bailar Tango Argentino, irrumpe como fenómeno social en todas las geografías y culturas, llegando a lugares remotos en los que solo se nos reconocía por el futbol.
Se realizan Festivales en casi todos los países atrayendo a miles de personas amantes de este prestigioso género musical. Se estima que en el mundo más de dos millones de personas bailan Tango, y una cantidad imponderable lo disfruta en conciertos y medios de comunicación. En ciudades y pueblos se reproducen milongas, academias de Tango y prácticas, con público de medio y alto poder adquisitivo, que generalmente convocan a profesores y músicos argentinos.
Se multiplican complejos turísticos y grandes hoteles temáticos, con actividades de Tango durante toda la jornada. Proliferan los cruceros exclusivos para bailar Tango. Durante el verano Europeo, cada semana hay algún festival de Tango en balnearios muy concurridos. En las bodas, es una nota de prestigio que los novios bailen un Tango en lugar del tradicional vals. Señales de TV, radio y sitios Web del mundo, difunden con envidiable éxito nuestro emblemático género.
En el ámbito de la salud, el Tango contribuye a la recuperación de pacientes con patologías neurológicas, cardiovasculares, oncológicas y psiquiátricas.
En este contexto favorable, el Tango se erige como cotizado “commodity” que no debemos desaprovechar por las ventajas competitivas con que contamos. Es necesario crear e implementar estrategias eficaces para promover la vitalidad de la cultura urbana cosmopolita que caracteriza a Buenos Aires como puerta de entrada a nuestro país.
Los viajeros que nos visitan se sorprenden al comprobar que nuestra gente, en su mayoría desconoce al Tango, lo menoscaba, y es difícil encontrar información en la que se considera la Meca del Tango.
En Buenos Aires se realiza el Festival y Mundial de Tango anualmente con una duración de dos semanas. Quienes hemos concurrido en numerosas ocasiones, lamentamos su desafortunada organización, con innumerables fallas producto de la improvisación y desconocimiento del tema. La información es tardía para quienes concursan, notifican faltando pocos días. Los participantes de eventos internacionales cuentan en otros festivales con la certeza de fechas confirmadas con un año de anticipación, ya que necesitan entrenar, organizar su viaje y tareas.
No hay actividades convocantes a lo largo del año, desaprovechando así la temporada alta de ingreso al país de visitantes que se da entre los meses de setiembre a marzo, ya que el Festival se realiza en el mes de agosto generalmente.
Durante el año, el Tango está presente en festivales locales del interior del país, en las casas de Tango que ofrecen cena/show para turistas y bares Notables. La Academia Nacional del Tango, la Dirección General de Patrimonio e Instituto Histórico de la Ciudad de Buenos Aires, el Museo Carlos Gardel, Asociaciones e Instituciones privadas, realizan algunas actividades destinadas especialmente al estudio de la historia del Tango. Las escuelas de Tango y especialmente la radio La 2 x 4, son valiosos promotores del género.
Sostenido básicamente por las milongas, con gran esfuerzo…algunas con éxito y la mayoría con dificultades económicas, el Tango sobrevive y convoca a milongueros locales y extranjeros. Se estima que lo bailan 5 mil personas en CABA y conurbano, y unos 10 mil en todo el país.
El Tango está incorporando a las jóvenes generaciones, aún en escasa proporción si se compara con la música extranjera, pero propagando un apasionado suceso que podría anunciar su resurgimiento. Se forman numerosas orquestas juveniles de Tango, así como cantantes, músicos y bailarines que salen al mundo en busca de trabajo profesional que aquí es escaso.
Objetivos que se proponen:
-Conformar una entidad que involucre a la comunidad de cultores del Tango y al Estado para impulsar acciones a partir de nuestro recurso cultural Tango, promoviendo su potencial integrador colectivo popular para el desarrollo social y económico.
– Impulsar acciones para fortalecer nuestra identidad nacional, y fructífera inserción en un mundo que valora y disfruta del Tango, mediante políticas de estado permanentes para el desarrollo sostenido de nuestras Industrias Culturales, generando una masa crítica consistente para su difusión.
– Obtener para nuestra sociedad beneficios concretos, poniendo en valor al Tango, declarado por UNESCO patrimonio cultural de la humanidad, que es aprovechado lucrativamente en todas las latitudes imaginables, y que nosotros como conjunto social no hemos sabido reconocer y valorar.
-Promover a la integración de todos los cultores del Tango: músicos, bailarines, estudiosos, milongueros, agentes de salud (Tango-terapeutas), creadores de Filete Porteño-declarado Patrimonio Cultural- y los apasionados del Tango popular que actualmente organizan actividades sin recursos y de manera aislada.
– Ofrecer al mundo nuestro principal producto cultural, generador de valor económico cuantioso. Contamos para ello con muchos profesionales formados y cultores del Tango en sus variadas propuestas, que están desaprovechados por falta de políticas institucionales que los promuevan.
– Emprender una corriente de incentivos y confianza, en el valor de la integración virtuosa de los recursos del Tango, para reinstalar nuestro país como origen, creador y capital mundial del Tango Argentino.
– Difundir entre los funcionarios públicos, y especialmente en el Servicio Exterior de la Nación conocimientos sobre Tango Argentino, que nos da identidad frente al mundo, para que lo difundan mediante políticas activas. Ploteo de los aviones de nuestra Línea de Bandera con imágenes de Tango Argentino y Filete Porteño.
-Aplicación de las leyes: 130 de la Ciudad de Buenos Aires y Nacional 24684. Transcurridos veinte años de su aprobación no se aplican efectivamente.
-Ocupación del espacio público con actividades culturales nacionales, enseñanza del género musical Tango en escuelas. Rescatar valores personales y familiares, logro de nuevas aptitudes: baile, canto, historias contadas por adultos mayores apasionados por el Tango. Cultivar valores socioculturales: tolerancia, respeto, convivencia, integración y compromiso con nuestras tradiciones.
-Fomentar una mayor participación de nuestra música y danza mediante su promoción en eventos populares, crear una Radio Nacional de Tango, programas en la TV Pública y generando una mística predominante en toda la ciudad, que en cada espacio se viva el Tango, difundiéndolo al interior y exterior del país para atraer la concurrencia de mayor número de turistas y amantes del Tango.
-Incentivar a la actividad privada a poner en valor comercial al Tango, usándolo como medio para promocionar y exportar otros productos y servicios. Fomentar la hotelería, gastronomía y el turismo, proponiendo a Buenos Aires- Argentina como Meca del Tango.
– Proponer a la Secretaría Turismo distribuir efectivamente folletos y mapas con información sobre locaciones históricas del Tango, Milongas en BA y todo el país Sitios WEB oficiales de Turismo y Cultura actualizados.
-Para concluir, expresamos sinceros deseos de que el Tango sea comprendido no como una reliquia del pasado, sino como enorme oportunidad para nuestro futuro mediante una activa política de promoción de Industrias Culturales.
A la generación de recursos derivados del comercio de bienes y servicios usuales, se han incorporado progresivamente otros, asociados a tradiciones culturales religiosas o mitológicas, y creaciones artísticas recientes de excepcional difusión y valor económico, que se constituyen en Industrias Culturales.
Las actividades productivas tradicionales tienen posibilidades de crecimiento restringido por limitaciones en el desarrollo tecnológico y altos costos; las nuevas tendencias internacionales proponen desarrollar la cultura como industria por el significativo valor económico que puede generar, ya que posibilita incorporar a diversos sectores de la sociedad convirtiéndolos en nuevos actores productivos.
Según la UNESCO “Las industrias culturales son fuente de empleo, lucro e ingresos, al mismo tiempo que un vector esencial del fomento de la diversidad cultural en el plano local e internacional”.
El desarrollo de Industrias Culturales (IC) exitosas, que promuevan un relevante posicionamiento en el plano internacional, requiere del compromiso conjunto de estado y comunidad, impulsando políticas institucionales concretas que aporten estrategias, marco jurídico y recursos sostenidos en el largo plazo.
Nuestro país, con reconocidos aportes a la cultura en sus múltiples áreas, cuenta con un recurso original, propio, creado en estas tierras: el Tango.
Compendio de nuestra Identidad Nacional, única por los factores que lo fueron conformando, el Tango Argentino ha transcurrido su centenaria historia con épocas gloriosas y ocasos temporales. Desde hace tres décadas, el Tango recobra fuerza creciente, inicialmente en Europa y Japón, expandiéndose al resto del mundo hasta sus más remotos confines.
Capitalizar este fenómeno para promocionar al país en el exterior implica delinear e implementar “estrategias específicas” destinadas a un público global.
Un estudio realizado por Booz Allen & Hamilton para la compañía Tango City, concluyó que la marca Tango tiene un peso específico comparable a Coca Cola.
El Tango Argentino equivalente en el mundo a nuestra Marca País, es generador de un reconocido valor emocional que promueve desarrollo cultural y económico.
La propagación global de la pasión por bailar Tango Argentino, irrumpe como fenómeno social en todas las geografías y culturas, llegando a lugares remotos en los que solo se nos reconocía por el futbol.
Se realizan Festivales en casi todos los países atrayendo a miles de personas amantes de este prestigioso género musical. Se estima que en el mundo más de dos millones de personas bailan Tango, y una cantidad imponderable lo disfruta en conciertos y medios de comunicación. En ciudades y pueblos se reproducen milongas, academias de Tango y prácticas, con público de medio y alto poder adquisitivo, que generalmente convocan a profesores y músicos argentinos.
Se multiplican complejos turísticos y grandes hoteles temáticos, con actividades de Tango durante toda la jornada. Proliferan los cruceros exclusivos para bailar Tango. Durante el verano Europeo, cada semana hay algún festival de Tango en balnearios muy concurridos. En las bodas, es una nota de prestigio que los novios bailen un Tango en lugar del tradicional vals. Señales de TV, radio y sitios Web del mundo, difunden con envidiable éxito nuestro emblemático género.
En el ámbito de la salud, el Tango contribuye a la recuperación de pacientes con patologías neurológicas, cardiovasculares, oncológicas y psiquiátricas.
En este contexto favorable, el Tango se erige como cotizado “commodity” que no debemos desaprovechar por las ventajas competitivas con que contamos. Es necesario crear e implementar estrategias eficaces para promover la vitalidad de la cultura urbana cosmopolita que caracteriza a Buenos Aires como puerta de entrada a nuestro país.
Los viajeros que nos visitan se sorprenden al comprobar que nuestra gente, en su mayoría desconoce al Tango, lo menoscaba, y es difícil encontrar información en la que se considera la Meca del Tango.
En Buenos Aires se realiza el Festival y Mundial de Tango anualmente con una duración de dos semanas. Quienes hemos concurrido en numerosas ocasiones, lamentamos su desafortunada organización, con innumerables fallas producto de la improvisación y desconocimiento del tema. La información es tardía para quienes concursan, notifican faltando pocos días. Los participantes de eventos internacionales cuentan en otros festivales con la certeza de fechas confirmadas con un año de anticipación, ya que necesitan entrenar, organizar su viaje y tareas.
No hay actividades convocantes a lo largo del año, desaprovechando así la temporada alta de ingreso al país de visitantes que se da entre los meses de setiembre a marzo, ya que el Festival se realiza en el mes de agosto generalmente.
Durante el año, el Tango está presente en festivales locales del interior del país, en las casas de Tango que ofrecen cena/show para turistas y bares Notables. La Academia Nacional del Tango, la Dirección General de Patrimonio e Instituto Histórico de la Ciudad de Buenos Aires, el Museo Carlos Gardel, Asociaciones e Instituciones privadas, realizan algunas actividades destinadas especialmente al estudio de la historia del Tango. Las escuelas de Tango y especialmente la radio La 2 x 4, son valiosos promotores del género.
Sostenido básicamente por las milongas, con gran esfuerzo…algunas con éxito y la mayoría con dificultades económicas, el Tango sobrevive y convoca a milongueros locales y extranjeros. Se estima que lo bailan 5 mil personas en CABA y conurbano, y unos 10 mil en todo el país.
El Tango está incorporando a las jóvenes generaciones, aún en escasa proporción si se compara con la música extranjera, pero propagando un apasionado suceso que podría anunciar su resurgimiento. Se forman numerosas orquestas juveniles de Tango, así como cantantes, músicos y bailarines que salen al mundo en busca de trabajo profesional que aquí es escaso.
Objetivos que se proponen:
-Conformar una entidad que involucre a la comunidad de cultores del Tango y al Estado para impulsar acciones a partir de nuestro recurso cultural Tango, promoviendo su potencial integrador colectivo popular para el desarrollo social y económico.
– Impulsar acciones para fortalecer nuestra identidad nacional, y fructífera inserción en un mundo que valora y disfruta del Tango, mediante políticas de estado permanentes para el desarrollo sostenido de nuestras Industrias Culturales, generando una masa crítica consistente para su difusión.
– Obtener para nuestra sociedad beneficios concretos, poniendo en valor al Tango, declarado por UNESCO patrimonio cultural de la humanidad, que es aprovechado lucrativamente en todas las latitudes imaginables, y que nosotros como conjunto social no hemos sabido reconocer y valorar.
-Promover a la integración de todos los cultores del Tango: músicos, bailarines, estudiosos, milongueros, agentes de salud (Tango-terapeutas), creadores de Filete Porteño-declarado Patrimonio Cultural- y los apasionados del Tango popular que actualmente organizan actividades sin recursos y de manera aislada.
– Ofrecer al mundo nuestro principal producto cultural, generador de valor económico cuantioso. Contamos para ello con muchos profesionales formados y cultores del Tango en sus variadas propuestas, que están desaprovechados por falta de políticas institucionales que los promuevan.
– Emprender una corriente de incentivos y confianza, en el valor de la integración virtuosa de los recursos del Tango, para reinstalar nuestro país como origen, creador y capital mundial del Tango Argentino.
– Difundir entre los funcionarios públicos, y especialmente en el Servicio Exterior de la Nación conocimientos sobre Tango Argentino, que nos da identidad frente al mundo, para que lo difundan mediante políticas activas. Ploteo de los aviones de nuestra Línea de Bandera con imágenes de Tango Argentino y Filete Porteño.
-Aplicación de las leyes: 130 de la Ciudad de Buenos Aires y Nacional 24684. Transcurridos veinte años de su aprobación no se aplican efectivamente.
-Ocupación del espacio público con actividades culturales nacionales, enseñanza del género musical Tango en escuelas. Rescatar valores personales y familiares, logro de nuevas aptitudes: baile, canto, historias contadas por adultos mayores apasionados por el Tango. Cultivar valores socioculturales: tolerancia, respeto, convivencia, integración y compromiso con nuestras tradiciones.
-Fomentar una mayor participación de nuestra música y danza mediante su promoción en eventos populares, crear una Radio Nacional de Tango, programas en la TV Pública y generando una mística predominante en toda la ciudad, que en cada espacio se viva el Tango, difundiéndolo al interior y exterior del país para atraer la concurrencia de mayor número de turistas y amantes del Tango.
-Incentivar a la actividad privada a poner en valor comercial al Tango, usándolo como medio para promocionar y exportar otros productos y servicios. Fomentar la hotelería, gastronomía y el turismo, proponiendo a Buenos Aires- Argentina como Meca del Tango.
– Proponer a la Secretaría Turismo distribuir efectivamente folletos y mapas con información sobre locaciones históricas del Tango, Milongas en BA y todo el país Sitios WEB oficiales de Turismo y Cultura actualizados.
-Para concluir, expresamos sinceros deseos de que el Tango sea comprendido no como una reliquia del pasado, sino como enorme oportunidad para nuestro futuro mediante una activa política de promoción de Industrias Culturales.